¿Problema de fechas?
Curiosidades de nuestra prensa
Cada vez que ocurre algún accidente aéreo de importancia, la prensa local nos ilustra acerca de otros hechos de igual naturaleza. A propósito del afortunado hallazgo del Cessna Grand Caravan estrellado hace algunos días en las cercanías de La Junta, el diario La Tercera del jueves 12 de junio nos presenta una gráfica mencionando otros hechos en que los aviones accidentados nunca fueron encontrados, en este caso citando "fuentes de la DGAC y de la FACh". Es del caso mencionar que de los tres hechos referidos, uno de ellos presenta una fecha errada, ignoro la causa si es que la fuente del diario es la que ellos mencionan. Se trata del "Cessna bimotor de la empresa Icaro", hecho que el diario, como muestra la imagen adjunta (tomada del mismo periódico), lo sitúa en el día "19 de diciembre de 1983".
Lo real, sin embargo, es que tal asunto ocurrió el 28 de noviembre de 1983. El vuelo era entre Punta Arenas y Puerto Montt, el que resultó extraviado en, se supone, las cercanías de la isla Guarello, de acuerdo a la última posición radiada del aeroplano, emitida a las 14.55 horas de ese día. El avión, el Piper PA-31-350 CC-CIL, c/n 31-7852144, pertenecía, en efecto y desde el 9 de julio de 1980, a la Línea Aérea Icaro Services S.A., pero en el momento del accidente era operado por la empresa Línea Aérea Magallanes (o LAMA, como también se le conocía), ligada al empresario magallánico Luis Utman. Esta pequeña empresa aérea lo volaba como taxi bajo contrato de arrendamiento de un mes de duración, y justamente se encontraba en vuelo a Santiago para ser devuelto al arrendador. En este último viaje había despegado, entonces, desde Punta Arenas a las 13:20 horas. Nunca fue encontrado, y sus tripulantes, el piloto Marcelo Cisternas Bouillon y el copiloto Lautaro Hauyon Torres, fueron dados por fallecidos.
Lo real, sin embargo, es que tal asunto ocurrió el 28 de noviembre de 1983. El vuelo era entre Punta Arenas y Puerto Montt, el que resultó extraviado en, se supone, las cercanías de la isla Guarello, de acuerdo a la última posición radiada del aeroplano, emitida a las 14.55 horas de ese día. El avión, el Piper PA-31-350 CC-CIL, c/n 31-7852144, pertenecía, en efecto y desde el 9 de julio de 1980, a la Línea Aérea Icaro Services S.A., pero en el momento del accidente era operado por la empresa Línea Aérea Magallanes (o LAMA, como también se le conocía), ligada al empresario magallánico Luis Utman. Esta pequeña empresa aérea lo volaba como taxi bajo contrato de arrendamiento de un mes de duración, y justamente se encontraba en vuelo a Santiago para ser devuelto al arrendador. En este último viaje había despegado, entonces, desde Punta Arenas a las 13:20 horas. Nunca fue encontrado, y sus tripulantes, el piloto Marcelo Cisternas Bouillon y el copiloto Lautaro Hauyon Torres, fueron dados por fallecidos.